Los roedores han sido un flagelo para el hombre durante miles de años. Por sus hábitos de roer, rompen cables eléctricos, facilitando los cortocircuitos que pueden resultar en incendios con pérdidas consecuentes de edificios, equipos, productos almacenados, etc. Por otro lado, también matan aves de corral u otros animales domésticos. Destruyen o contaminan alimentos, tanto en el campo como en las bodegas Los roedores, especialmente ratas, están implicados en la transmisión de por lo menos 35 enfermedades que afectan al hombre y sus animales domésticos incluyendo leptospirosis, triquinosis, salmonelosis y peste bubónica.
Los roedores citadinos no sólo son responsables de la inmensa lista de daños antes mencionados, sino de daños a construcciones, viviendas, instalaciones fabriles, etc., Deterioran, puertas, ventanas, cañerías, muros de madera o de concreto e inclusive, causan daño a instalaciones telefónicas, computadoras, equipos electrodomésticos e instalaciones eléctricas con alto riesgo de incendio. También causan pérdidas económicas, por paros en la producción, ocasionadas por cortocircuitos o interrupciones del fluido eléctrico.